Neumólogos y alergólogos instan al desarrollo de un Plan Nacional de asma grave para mejorar el abordaje de la enfermedad
En España, aproximadamente el 4% de la población asmática adulta vive con asma grave no controlada
La notable incidencia de esta patología, junto a la mortalidad y morbilidad asociadas, han llevado a neumólogos y alergólogos a recoger una serie de conclusiones y propuestas que trasladan en un documento en formato de infografía y que fueron recogidas tras la celebración de la Jornada Retos y Medidas necesarias para la atención integral del paciente con asma grave. La jornada ha sido organizada por la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa), con la colaboración de GSK. Además, esta jornada se enmarca dentro de las actividades promovidas por el Instituto Nacional de Asma Grave (INAG), un proyecto impulsado por GSK y que tiene por objetivo contribuir al avance en el abordaje de esta patología.
Domingo del Cacho, presidente de la Agrupación Territorial de Sedisa en Madrid, ha señalado que «el INAG supone un recurso para optimizar la gestión, la calidad asistencial y la eficiencia de la atención prestada al paciente con asma grave”. En el documento, los especialistas destacan en la necesidad de llevar a cabo un Plan Nacional de Asma Grave. El objetivo es que contribuya a sentar las bases para optimizar la atención prestada a los pacientes y mejorar la capacitación de los profesionales. Además de fomentar la investigación, la eficacia de las intervenciones en salud, la debida coordinación entre niveles asistenciales y especialidades. Por otra parte, debe fomentar la gestión integrada y eficiente de recursos.
Según los expertos, la puesta en marcha de este Plan supondría una mejora en el manejo de la enfermedad y el cumplimiento adecuado del tratamiento
La puesta en marcha de este Plan supondría «una mejoría en la concienciación de la enfermedad, el manejo y el cumplimiento adecuados del tratamiento; y la creación y el fortalecimiento de unidades especializadas multidisciplinares, redundaría en una disminución de las exacerbaciones y de los ingresos hospitalarios. Asimismo, disminuiría la mortalidad, un manejo más adecuado de las comorbilidades, reducción de la carga económica y asistencial, y una mejor evolución, a largo plazo, con reducción de los efectos secundarios de la medicación y de la pérdida de función pulmonar», sostiene el Dr. Ignacio Dávila, jefe del Servicio de Alergología del Hospital Universitario de Salamanca y miembro del INAG. Asimismo, ha recordado la importancia de realizar programas de educación. Es fundamental facilitar a los pacientes el correcto manejo de los inhaladores para mejorar las tasas de cumplimiento.
Por su parte, Jesús Sanz Villorejo, miembro de la Junta Directiva de Sedisa, ha explicado la importancia de las unidades multidisciplinares. «Cada vez es más patente que el correcto diagnóstico, manejo y seguimiento del asma grave requiere de unidades multidisciplinares que garanticen la excelencia en la atención a los pacientes. Esta unidades aceleran los procedimientos y la indicación de tratamientos para alcanzar lo antes posible un control de la enfermedad».
Sanz Villorejo: «El correcto diagnóstico, manejo y seguimiento del asma grave requiere de unidades multidisciplinares que garanticen la excelencia en la atención a los pacientes»
Los especialistas también han identificado la necesidad de una mayor coordinación entre Atención Primaria y Atención Hospitalaria; «Hay pacientes graves que se beneficiarían de una atención experta y no llegan a recibirla o la reciben tarde. Por supuesto, la tecnología podría ayudar. En primer lugar, facilita el contacto entre los niveles asistenciales a través de la consulta electrónica. Y, por otra parte, el uso del big data para identificar pacientes que no estén bien controlados», remarca el Dr. Luis Pérez de Llano, jefe del Servicio de Neumología del Hospital Universitario Lucus Augusti de Lugo.
Según señalan en el documento, la gestión por procesos es clave para la mejora en la asistencia a los pacientes. Desde el INAG concluyen que uno de los objetivos es evolucionar desde una estructura vertical hacia una transversal caracterizada por la multidisciplinariedad, permitiendo identificar el lugar en el que se encuentran las fortalezas y áreas de mejora dentro del recorrido asistencial: diagnóstico, derivación, acceso al tratamiento en el ámbito hospitalario o acceso a los especialistas adecuados, entre otros. Para el Dr. Pérez de Llano, el papel de la enfermería en la atención al paciente asmático es clave y cada vez cobra mayor protagonismo.
Desde INAG apuntan a un claro objetivo: evolucionar desde una estructura vertical hacia una transversal caracterizada por la multidisciplinariedad
Administración domiciliaria de medicamentos
Continuar trabajando en las mejoras de la administración domiciliaria de medicamentos indicados para el asma grave no controlada también forma parte de las conclusiones alcanzadas. Punto en el que se hace referencia a la necesidad de optar por la personalización en la dispensación de los tratamientos adaptada al perfil, actitud y grado de autonomía de los pacientes. El Dr. José Manuel Martínez Sesmero, jefe del Servicio de Farmacia del Hospital Clínico Universitario San Carlos de Madrid, ha insistido en que «debemos acercar la asistencia y cuidado de la salud al domicilio, siempre en las mejores circunstancias». Para ello, es necesario «redefinir todos los procesos susceptibles de ser cambiados o incluso eliminados. Hay que tener en cuenta la voz del paciente, implicando y coordinando a todos los profesionales de la salud, utilizando tecnologías de la información y comunicación, sin perder de vista que el objetivo es ofrecer un servicio más adecuado a cada ser humano«. Aspecto en el que resulta vital, ha asegurado Martínez Sesmero, «la utilización adecuada de la innovación en medicamentos, cuyo garante sea un sistema de acceso más homogéneo, coherente, protocolizado y bien definido para todo el SNS, y que se enfoque a la medición de resultados en salud